...Seguimos dirección al Arthur's Pass, esperando que no nos pillase la borrasca con lluvia que venía del este. Ese día tocaba camping decente, pensión u hotel....y tocaba conexión para poder comunicarse. Pero sobretodo tocaba una merecida ducha! Llegamos al Pass, que es un pueblo al más puro estilo Jackson, pero en pequeño, y lo primero que hicimos fue encontrar un bonito hostel donde pudimos cocinar bien anchos, y pudimos ducharnos. Me sentó tan bien la ducha, que me hizo recapacitar sobre las necesidades humanas y la pirámide de Maslow. En ese momento mi máxima prioridad fue cubrir mi necesidad básica de ducharme, y me sentí que con eso y una llamada a casa, era feliz.
Dormimos muy bien en la autocaravana, menos Alex que alquiló una habitación, y el día siguiente se levantó lloviendo y de 'jour blanche', un problema en NZ pues no hay estaciones con árboles, además que la cota estaba por las nubes. Decidimos irnos a la costa este a hacer surf. Porqué no? Llegamos a una ....ciudad.... donde vimos que las olas del mar de Tasmania no eran tontería, pero nosotros queríamos seguir el plan, así que buscamos un lugar donde alquilar tablas y neoprenos.
Nos miraban con cara rara. El agua estaba demasiado fría para los turistas que suelen alquilar equipos de surf, y no tenían neoprenos. Como máximo licras. Y no estábamos para experimentos, así que desistimos y nos fuimos a mirar las olas..
En ese momento me entraron ganas de bañarme. Toda la mañana hablando de surf y olas y no nos íbamos a meter?? si hombre...me quité toda la ropa y no me lo pensé dos veces. Intenté correr por unos cantos rodados que me hacían polvo los pies hasta que llegué al agua, que por cierto estaba helada, me metí las piernas, el cuerpo y finalmente sumergí la cabeza...ya me había bañado en el mar de Tasmania!!

Al salir, me sequé rápido y nos pusimos dirección Wanaka por la carretera de la costa oeste. Llegamos al glaciar Franz Joseph Glacier, donde llegamos a la tarde. La carretera era de la costa oeste es espectacular, y cuando llegamos a Franz Joseph (es un pueblo) se respiraba ambiente alpinista.
Mucha gente nos había recomendado el glaciar, así que era un 'must' en NZ. Aparcamos en el párking donde comienza una senda bastante marcada y transitada, aunque al llegar por la tarde apenas había gente. Nos pusimos a caminar y en unos 15 minutos caminando por una selva llegamos a la cuenca glaciar con las morrenas al fondo. Parece que está cerca, así que nos ponemos en camino hasta ver si tocamos hielo prehistórico. Apresuramos el paso ya que amenaza lluvia, por un valle que fue glaciar hasta hace relativamente poco. Se ve la marca de la erosión glaciar en las paredes del valle. Una pena que estén en retroceso los glaciares, pero no entraremos en debates sobre cambio climático humano o natural....
Se pone a chispear y regresamos. Todavía tenemos 45 minutos hasta el coche así que nos apresuramos por ese terreno que me recuerda al Abismo de Helm del Señor de los Anillos, y su batalla final...no en vano estamos en la isla donde se rodó la mayoría de la trilogía.
Una vez en el Motorhome, ya casi de noche, emprendemos camino hacia Wanaka para dormir allí y al día siguiente esquiar Treble Cone.....Sigue
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